La mujeres se esfuerza a diario por tener el peso y talla ideal. Sin embargo, esta situación puede volverse un problema si luego de la pérdida del peso sumamos el problema de la flacidez posterior a la pérdida de masa.
Una de las mejores soluciones para mitigar este desagradable problema es el masaje reafirmante. Esta técnica consiste en pequeños golpes enérgicos en las zonas afectadas como el abdomen, los muslos, los glúteos o las caderas. El masaje reafirmante mantiene la salud de nuestra piel, te devuelve el aspecto firme y terso que alguna vez tuviste, reduce el volumen y grasa localizada.
Si quieres un resultado aún mejor, debes complementarlo con una dieta equilibrada y una rutina de ejercicios diarios.
El masaje reafirmante es ideal para personas que tienen sobrepeso o sufren de una flacidez excesiva. El tratamiento para reafirmar la piel está destinado principalmente para recuperar la elasticidad y tonicidad de la piel.
Las sesiones deben ser mínimo 10 y es aconsejable hacerlo 2 veces a la semana para ver resultados. El masaje reafirmante del cuerpo consiste en realizar pequeños amasamientos para facilitar la eliminación de líquidos de toxinas.
Si deseas comenzar tu tratamiento reafirmante debes solicitarnos evaluar el numero de sesiones para resultado real.
Utilizamos un gel criogéneo o vendas frías que favorecen la contracción muscular. Además, al bajar la temperatura en la piel, esta responde aumentando la temperatura local y quema grasa en la zona trabajada.
Beneficios del masaje reafirmante:
Mejora el retorno venoso.
Favorece la eliminación de residuos y tóxinas.
Mejora la circulación.
Reafirma la piel.
Recomendaciones para el masaje reafirmante:
Seguir una dieta balanceada.
Beber 2 litros de agua diarios.
Tener una buena digestión.
Hacer actividad física.
Complementar con una crema reafirmante en la casa.
Tratamiento reafirmante para el cuerpo:
Untar todo el cuerpo con crema limpiadora. Luego con una esponja de crin natural frota con movimientos circulares de abajo hacia arriba de tu cuerpo. Retira la crema con una toalla humedecida en agua, aplica un exfoliante a base de gránulos de sal marina y realiza masajes circulares de abajo hacia arriba en todo el cuerpo.
Consejos reductores caseros:
Limpia la zona a masajear con alcohol.
Si tienes una esponja o guante de crin masajea la zona con movimientos circulares en sentido de las agujas del reloj.
Aplica la crema reductora.
Amasa la zona.
Da pequeños golpecitos o pellizcos durante 30 minutos.
Repite estos masajes diariamente, después del baño y dúchate idealmente con agua fría.
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